Un saludo cordial a todos, visitantes de este blog, de diferentes regiones de Latinoamérica. Hoy quiero compartirles algo de música de mi propio catálogo de composiciones, debidamente registradas y protegidas en todo el mundo.
Entre 2003 y 2006, nos metimos todo Frigüey (mi banda) a componer y grabar nuestro segundo disco de larga duración que llevaría por nombre "No Sabemos Amar".
En esa etapa de la banda, el proceso de composición era variable. Algunas canciones partieron de unos cuantos versos con una melodía que alguno de los integrantes llevaba al ensayo, otras fueron hechas en dinámica de grupo y otras más fueron compuestas en letra y música por mí.
Y precisamente de las canciones hechas por mí es que puedo hablarles con mayor propiedad. Como lo he dicho antes, mi método de composición y songwriting es bien natural, pero nunca puedo comenzar a escribir sin tener qué decir, sin tener una historia. Desde ese entonces hasta hoy, siempre viene a mi mente una historia real o ficticia primero, para después sacar de ella una canción.
Así, con los primeros Cybercafés (establecimientos casi extintos donde rentabas una computadora para navegar por internet) y mis primeras experiencias en el cyber-espacio, vino a mi cabeza una historia ficticia donde un cybernauta salvadoreño conoce a una chica al otro lado del mundo en los populares chats de la época. Ella se ríe de sus ocurrencias, manda una foto donde se ve muy guapa y todo va de lujo hasta que nuestro amigo le manda su propia foto... y nunca más recibe mensajes de la chica 😞 , como podés escuchar en el tema "Raquelita.com".
Entre 2003 y 2006, nos metimos todo Frigüey (mi banda) a componer y grabar nuestro segundo disco de larga duración que llevaría por nombre "No Sabemos Amar".
En esa etapa de la banda, el proceso de composición era variable. Algunas canciones partieron de unos cuantos versos con una melodía que alguno de los integrantes llevaba al ensayo, otras fueron hechas en dinámica de grupo y otras más fueron compuestas en letra y música por mí.
Y precisamente de las canciones hechas por mí es que puedo hablarles con mayor propiedad. Como lo he dicho antes, mi método de composición y songwriting es bien natural, pero nunca puedo comenzar a escribir sin tener qué decir, sin tener una historia. Desde ese entonces hasta hoy, siempre viene a mi mente una historia real o ficticia primero, para después sacar de ella una canción.
Así, con los primeros Cybercafés (establecimientos casi extintos donde rentabas una computadora para navegar por internet) y mis primeras experiencias en el cyber-espacio, vino a mi cabeza una historia ficticia donde un cybernauta salvadoreño conoce a una chica al otro lado del mundo en los populares chats de la época. Ella se ríe de sus ocurrencias, manda una foto donde se ve muy guapa y todo va de lujo hasta que nuestro amigo le manda su propia foto... y nunca más recibe mensajes de la chica 😞 , como podés escuchar en el tema "Raquelita.com".
O la historia del cumbiero en tiempos de reggaeton que sólo soñaba con que su enamorada bailara sus canciones... y como a ella sólo le gustaba perrear, el susodicho compone para ella el "Cumbiatón"
O la historia del tipo de la friendzone que hace mil cosas por su enamorada pero toda respuesta por parte de ella es un no. Entonces, cuestionando toda teoría machista y tradicional, se plantea: ¿Y qué tal si son ellas las que nos utilizan, manipulan y esclavizan? como lo cantamos en el siguiente tema:
O ¿por qué no juntar varias historias sobre amor y desamor en una sola canción, que comprueban que a veces como seres humanos "No sabemos amar"?
Decirles que me he divertido creando estos temas es poco, y me llena de satisfacción contarles que algunos de ellos como "Cumbiatón" y "Raquelita.com" han estado en importantes listas de popularidad de mi país y siguen siendo de los favoritos del público en nuestros shows.
Seguimos celebrando #20AñosDeFiesta Frigüey, así que pronto les compartiré sobre nuestro tercer álbum "La Fiesta Frigüey". Y recuerda, si quieres ponerte en contacto conmigo, puedes dejarme tus inquietudes y correo de contacto en el espacio de comentarios.
¡Feliz día y mucha música!